jueves, 20 de diciembre de 2012

Una gran alegria, para poner aún más empeño

     Hoy es un día extraño: no sé cómo expresar con palabras lo que hoy ha acontecido...
     A primera hora, y visitando como habituálmente hago la página web de Adopty ; la cuál desde el principio he considerado una especie de Biblia (con todos los respetos) por sus artículos diarios, noticias actualizadas y resto de información allí publicada...descubrí que había sido publicado un artículo de éste, vuestro blog...Lo cierto es que, me ha dado un vuelco el corazón y me ha llenado de orgullo, pero humíldemente creo, que no podría pedir más. Ha sido otra de las muchas alegrías que éste precioso proceso de adopción nos ha regalado. Ya son muchas las ocasiones en que nos ha ayudado a superar "un mal día"...y el proceso no acaba más que empezar.
     Cuando las cosas se hacen con el corazón, no se espera una recompensa; pero lo de hoy reálmente, me ha sorprendido y es una auténtica recompensa que sólo podré agradecer de una manera...haciendo que mi esfuerzo sea aún más grande, que pueda dar ánimo y ayuda a la gente que, como nosotros, vive su particular y especial sueño: el sueño más bonito en la vida...el de tener un hijo(-a).
     Nunca me cansaré de decir que el hecho de que el nuestro (-a) vaya a ser adoptado, no cambia en nada, el deseo que siempre hemos tenido. Cada uno, en base a cómo se desarrolla su vida, toma sus decisiones; y la nuestra nos ha llevado por un camino que, tenemos cada día más claro, lo único que nos ha provocado es, aumentar el deseo de tenerlo junto a nosotros. Las alegrías y las ilusiones que se nos van presentando, prevalecen sobre los miedos y las tristezas; y lo maravilloso del proceso y de la importancia que se le da al niño después del abandono que ya ha sufrido, hace que quienes estamos interesados en tenerlo a nuestro lado, tengamos plena convicción del paso tan importante que damos...
     Y además, siempre estaremos agradecidos al que en su día llegue a nuestro lado, por haber propiciado que nos hayamos dado cuenta (y hayamos vivido), que sigue habiendo humanidad en nuestra sociedad: y que la gente que vive y siente la adopción, es gente dispuesta a ayudar de la misma manera que se viven los procesos...desde el corazón.

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